B-R-A-V-E AND H-O-P-E

El primer paso
Por: Judith Cassandra J

Después de escribir mi primera columna, tuve la oportunidad de recibir algunos comentarios que me preguntaban por qué había decidido escribir acerca de la depresión o de la importancia que tenemos que darle a los trastornos mentales, en especial, cuando me preguntaron, no sabía exactamente qué responder pero solo dije: ¡porque es horrible!

Creo que mi respuesta pudo haber sido más larga o más específica, pude haber meditado más lo que dije, sin embargo creo que aunque corta, mi respuesta es cierta. 

¿Imaginan que cada cosa que sientan o su percepción de la vida, de cierta manera los deje invalidados para hacer cada una de sus actividades que les gusta? ¿Que todo sea originado por la mente y que aunque no sea la realidad, sintamos que únicamente existe una sola salida, una posibilidad y que todo, prácticamente todo es un completo desastre? 

Imagina que vives todo un año así, entonces no disfrutas tu cumpleaños, el atardecer se vuelve triste, salir de casa te llena de temor y fácilmente podrías sentarte a llorar en una banqueta porque simplemente hay una presión en el pecho que te hace sentir una desesperación gigante y lo único que quisieras es que todo terminara ya. Sería más fácil desaparecer que enfrentar todas las dificultades de la vida. 

Esto, suena bastante horrible,¿cierto?

Sin embargo, es real, sucede. Miles de jóvenes y adultos son fuertes víctimas de los trastornos mentales que impiden una vida plena y feliz. 

Bastante horrible para ser verdad, así que ¿Qué hacer para evitar, prevenir o ayudar con estas situaciones? 

A través de observar distintos comportamientos entre compañeros de clase, familia, iglesia, calle y trabajo, me he dado cuenta que las conductas son repetidas, como seres humanos solemos imitar el comportamiento a veces de una manera inconsciente, en algunas ocasiones porque creemos que comportarnos de cierta manera será lo mejor para enfrentar algunas situaciones de la sociedad o por qué se vuelve lo aceptable dentro de los estándares de comportamiento, sin embargo, mencionaré una conducta que nos puede poner en una posición muy cercana a quebrarnos emocionalmente. 

El hacerse el insensible.

Es importante que aceptemos con franqueza algo que nos causa dolor, una conducta de un ser amado, el hecho de no recibir algo que esperábamos, sentir la traición de un familiar o amigo, haber perdido una cartera o si lo que estamos viviendo: las circunstancias económicas, familiares, educativas, no son lo que esperamos, etc...existen varias situaciones que pueden dolernos o causarnos frustración, y por lo tanto, debemos ser francos con lo que sentimos, ejemplo, si no tenemos la fortaleza para estar en una relación abierta, ¿por qué estamos ahí? Si realmente esperamos sentir el compromiso de una persona, ¿por qué entonces no lo exigimos? Si terminar con alguien nos dolió hasta el alma, ¿por qué no lo aceptamos, lloramos un tiempo y somos honestos en decir: "sī, él fue el maldito a quien yo amé y lo odio por romperme el corazón" o si el divorcio de nuestros padres a los 3 años o a los 16 años nos causó dolor, es totalmente permitido y debemos demostrarlo. Tal vez las palabras serán un poco soeces, pero a veces no decimos tantas cosas para no sonar mal, para hacernos lo fuertes o peor aún, para fingir que lo que ha pasado es algo "sin importancia". El auto engaño es lo peor, sufrir en silencio mata, no lo perciben las personas a tú al rededor (tal vez) y tú podrías seguir como si realmente no importara(ajá) pero dime, ¿vale la pena fingir una vida perfecta? 

Todos los seres humanos tenemos el derecho de decir todo aquello que pensamos, aquello que nos duele, el hecho de callarlo o no permitirnos pasar por el duelo de alguna situación nos hace vulnerables

Recuerda, si algo no va bien, una de las primeros pasos para curarnos o cambiarlo, es aceptar el efecto que causa en nosotros. O sea, el primer paso es "aceptar" 

TODO CAMBIO ES POSIBLE, SIGUE ADELANTE. 

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